El presidente de la CES aboga por intensificar, tal como lo hace la DGT, las campañas de concienciación sobre PRL
En Sevilla, el 28 de julio (EUROPA PRESS) – Miguel Rus, presidente de la Confederación de Empresarios de Sevilla (CES), afirma que el incumplimiento en materia de prevención de riesgos laborales (PRL) «debería ser motivo de despido del empleado o de sanción al empresario». Rus enfatiza que la responsabilidad en este tema recae en ambas partes, empresarios y trabajadores, y que es fundamental trabajar juntos, concienciar y garantizar el cumplimiento de las medidas de seguridad; aquellos que no lo hagan deberán enfrentar las consecuencias legales.
Estas declaraciones surgen en medio de la preocupación por los accidentes laborales, como el ocurrido recientemente en Écija donde un trabajador falleció tras caerle una placa de hormigón de siete toneladas, sumando un total de once víctimas mortales en la provincia en lo que va del año.
Rus destaca la necesidad de un compromiso conjunto para eliminar la siniestralidad laboral, señalando que este es un deber tanto de los empresarios como de los trabajadores y sindicatos. Para él, la meta debe ser reducir la siniestralidad a cero, ya que se trata de vidas y familias en juego.
Tanto los empresarios como los sindicatos coinciden en la importancia de trabajar de manera conjunta para prevenir accidentes laborales y garantizar la seguridad en el trabajo. Rus subraya que los empresarios deben cumplir con las medidas de prevención y asegurarse de que sus trabajadores también las respeten, ya que de lo contrario se arriesgan a sanciones legales y a comprometer la viabilidad de la empresa.
En cuanto a la reducción de la jornada laboral propuesta por el Gobierno, Rus considera fundamental hablar de productividad y flexibilidad. Destaca que no todas las empresas podrían aplicar esta medida y que legislar sin tener en cuenta la realidad de los sectores empresariales podría ser perjudicial. Además, señala que el aumento de costes para las empresas podría disminuir su competitividad y poner en riesgo su futuro, especialmente en un contexto donde muchas empresas aún están pagando préstamos relacionados con la pandemia de Covid-19.