El veredicto del jurado popular en el juicio celebrado en la Audiencia de Sevilla ha determinado que el acusado de nacionalidad boliviana, Alfredo G.C., es culpable de la muerte «intencional» de su pareja sentimental en 2022. El crimen ocurrió en el barrio de San Jerónimo, donde el acusado ocultó el cadáver entre unos juncos.
A pesar de la justificación del acusado de actuar bajo los efectos del alcohol y la rabia de los celos, el jurado popular, de forma unánime, ha concluido que el acusado mató a su pareja, Virginia, también boliviana de 51 años, de manera intencional debido a su condición de mujer y su deseo de terminar la relación.
Según la investigación, en el piso alquilado donde convivían, el acusado propinó un fuerte golpe en la cara a la víctima tras descubrir marcas de succión en su cuello y después de que ella expresara su interés en otro hombre. Tras una discusión, el acusado se retiró del lugar, pero regresó más tarde y, aprovechando que la víctima estaba dormida y bajo los efectos del alcohol, la asfixió mecánicamente.
El jurado ha determinado que el acusado actuó de manera intencional en la muerte de su pareja, a pesar de sus argumentos de estar bajo la influencia del alcohol y los celos. Se espera que próximamente se dé a conocer más información sobre este trágico suceso.