La Asociación Ben Baso muestra su desacuerdo total con los planes de convertir el enclave del castillo de San Jorge, ubicado bajo el mercado de abastos de Triana en Sevilla, en un museo de arte sacro. En una carta dirigida al alcalde de la ciudad, José Luis Sanz, la asociación defiende que este espacio debe «preservar la memoria histórica» del tribunal de la Inquisición y sus víctimas.
Según la asociación, el espacio ha sufrido cierres recurrentes debido a deficiencias técnicas y a la falta de una promoción adecuada. Además, critican que la cripta haya sido utilizada para exposiciones que no respetaban la historia y los contenidos del lugar.
Ben Baso se opone firmemente a la propuesta de instalar un museo de arte sacro en este lugar, recordando que el castillo fue sede de la Inquisición y que allí se llevaron a cabo juicios, torturas y condenas impuestas por la Iglesia. Consideran que es necesario explicar con rigor y didáctica la historia de la Inquisición, en lugar de enmascararla con muestras de arte sacro.
El grupo conservacionista sugiere buscar un lugar más adecuado para el museo de arte sacro, como el monasterio de San Jerónimo o la iglesia de San Laureano, y señala que la cripta del castillo no es el espacio idóneo para exhibir obras artísticas debido a las condiciones del lugar.
