La madre de Jesús Rosado Jiménez, un joven de 18 años asesinado en Palomares del Río en noviembre de 2022, ha expresado su conformidad con la sentencia del Juzgado de Menores número uno de Sevilla que condena a un joven a nueve años de internamiento y cinco años de libertad vigilada por su participación en el crimen. Sin embargo, ha manifestado su descontento con la Ley del Menor, que considera que hace que «matar salga barato» para los menores que son plenamente conscientes de sus actos y consecuencias.
La madre de la víctima ha valorado que el juez haya impuesto «casi las medidas máximas» para el joven condenado, pero también ha lamentado la situación de los otros tres menores implicados en el caso, que fueron citados como testigos. Asimismo, ha destacado la necesidad de un enjuiciamiento conjunto de mayores y menores en casos de especial gravedad para evitar sentencias contradictorias y pérdida de recursos.
La sentencia describe cómo el grupo de jóvenes, armados con una barra de hierro extensible y una navaja, abordaron a Jesús Rosado cerca de su domicilio en Palomares del Río, exigiéndole dinero y objetos de valor. Ante la negativa de la víctima, los agresores le propinaron golpes y puñaladas, causándole la muerte por un shock cardiogénico e hipovolémico.
El juzgado ha concluido que el menor acusado en el caso participó activamente en el crimen, entregando la navaja al agresor mayor de edad y golpeando a la víctima con la barra de hierro, contribuyendo de manera decisiva al resultado fatal. Aunque el acusado alegó que solo pretendía robar y no hacer daño, el juzgado ha determinado que esta justificación no le exime de responsabilidad.
En resumen, la madre de la víctima ha expresado su conformidad con la sentencia pero ha criticado la Ley del Menor por considerar que permite que los menores se enfrenten a consecuencias menores por actos graves de los que son plenamente conscientes.