La Audiencia de Sevilla ha dictado sentencia condenando a 13 personas a penas de entre 23 meses y dos años y medio de prisión por su participación en un punto de venta de cocaína y hachís que operaba las 24 horas del día en la barriada de Los Pajaritos. Sin embargo, estas penas de prisión han sido suspendidas bajo la condición de que los acusados no reincidan en la comisión de delitos y, en algunos casos, que inicien o continúen tratamientos para superar su adicción.
De acuerdo con la sentencia emitida el pasado 14 de diciembre, la Sección Cuarta de la Audiencia de Sevilla ha determinado que, tras una investigación de cuatro meses, agentes de la Policía Nacional desmantelaron un punto de venta de sustancias tóxicas, como la cocaína y el hachís, gestionado por los acusados. Se estableció que los inculpados, previamente concertados entre sí, se dedicaban a la venta, transporte y distribución de estas sustancias a cambio de dinero.
Según la sentencia, el punto de venta era administrado por Jordi N.C. y su pareja, Laura del Carmen T.R., con la ayuda de otros acusados que se encargaban del abastecimiento, transporte y distribución de la droga. Además, se determinó que múltiples personas toxicómanas, que no fueron identificadas, colaboraban avisando de la presencia policial en las cercanías del punto de venta, que operaba las 24 horas del día.
La sentencia también establece que, en el momento de los hechos, todos los acusados eran consumidores de sustancias tóxicas, por lo que se les atribuyó un delito contra la salud pública en la modalidad de sustancias que causan grave daño a la salud.
Como resultado, el tribunal ha condenado a los involucrados a penas de prisión y multas económicas, pero ha decidido suspender las penas de cárcel, siempre y cuando los condenados no incurran nuevamente en la comisión de delitos y, en algunos casos, que inicien o continúen tratamientos para superar su adicción.