En Marchena, Sevilla, ha dado inicio el estudio de la Cohorte IMPaCT, que tiene como propósito llevar a cabo un minucioso análisis de salud de 200.000 individuos representativos de la población española durante las próximas dos décadas. El objetivo principal es comprender mejor el origen de las principales enfermedades para poder prevenirlas y tratarlas de manera más efectiva.

Sevilla se suma como el tercer nodo andaluz que participa en este estudio nacional, uniéndose a Antequera (Málaga) y Maracena (Granada). Bajo la coordinación de Jorge Caro Bautista, del Instituto de Investigación Biomédica de Málaga (Ibima), el estudio se llevará a cabo en el centro de salud de Marchena, perteneciente al Área de Gestión Sanitaria de Osuna.

El proyecto involucrará a residentes de cuatro localidades: Marchena, Osuna, La Puebla de Cazalla y La Luisiana, con edades comprendidas entre los 16 y los 79 años. A través de cuestionarios, exploraciones físicas, pruebas fisiológicas y análisis de biomarcadores, se recopilará información de los participantes en este centro de salud.

Según Jorge Caro, la colaboración de la ciudadanía es fundamental para el éxito del proyecto, ya que tendrá un impacto positivo en la mejora de la salud de toda la población. El estudio, impulsado por el Instituto de Salud Carlos III a través del Centro de Investigación Biomédica en Red (CIBER), busca crear una cohorte poblacional de 200.000 personas para analizar los hábitos, la susceptibilidad genética y otros factores relacionados con la salud en la población española.

La importancia de este tipo de proyectos radica en la necesidad de conocer a fondo las causas de las enfermedades para poder prevenirlas de manera más efectiva en el futuro. La Cohorte IMPaCT contará con la colaboración de 21 instituciones españolas, incluyendo centros de atención primaria, hospitales, centros de investigación y el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Este ambicioso proyecto, que busca avanzar en la medicina de precisión en España, se encuentra en pleno desarrollo y se espera que se implante en 50 centros de salud distribuidos por todo el país. La participación ciudadana es clave en este proceso, por lo que se anima a las personas a colaborar si son contactadas desde su centro de salud para formar parte de la investigación.

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