Un teniente de la Guardia Civil acusado de presuntos delitos de revelación de secretos, cohecho, tráfico de drogas y hurto ha comenzado el juicio con jurado popular en la Audiencia de Sevilla. La Fiscalía le reclama 14 años y cuatro meses de prisión, a lo que el inculpado ha respondido negando los cargos, afirmando que «nunca» ha recibido dinero de narcotraficantes a cambio de información policial. Según su testimonio, colaboraba con un agente que dirigía la unidad de drogas y cumplía órdenes de dicho mando, quien resultó ser «un corrupto» que lo condujo al «derrotero» por el cual está acusado.
Durante su declaración como acusado, Raúl M.P. ha insistido en que «nunca» ha recibido dinero a cambio de revelar información de los archivos policiales, argumentando que los agentes consultan los mismos a diario para su labor y que eso «no es delito». Además, ha señalado que la información a la que él tenía acceso no era relevante para el mundo del narcotráfico, afirmando que quien sí manejaba «información golosa» era el agente encubierto de este caso.
Raúl M.P. ha negado haber intentado captar al agente encubierto para que colaborara con él, explicando que conocía a dicho agente desde 2009 y que colaboraba con él debido a su relación de amistad y su admiración profesional. Según su testimonio, este agente le ordenaba constantemente simular ser un agente corrupto e infiltrarse en el mundo de los narcotraficantes, llegando a pedir dinero a los traficantes y reclamar efectivo a él mismo. Alega que este agente resultó ser corrupto y que su caída en desgracia se debió a que «sabía demasiado» fruto de su trabajo a sus órdenes.