La plantilla del servicio municipal de grúa de Sevilla, gestionado por una unión temporal de empresas (UTE) conformada por Talleres y Automóviles Diego y Tranfocar, ha llevado a cabo este jueves una acción solidaria al donar sangre en el Centro de Transfusión Sanguínea de la ciudad. Esta iniciativa se enmarca en los paros parciales que el colectivo está realizando debido a un conflicto laboral con la dirección del servicio.
Los paros parciales, que se están llevando a cabo en horarios específicos entre el 20 de diciembre y el 7 de enero, han sido establecidos como medida de presión en respuesta al incumplimiento por parte de la UTE del acuerdo alcanzado en el Sercla durante la primavera pasada. Según Santiago López, responsable del Sindicato Profesional de Policías Municipales de España (Sppme), encargado del comité de huelga en este servicio municipal externalizado, la huelga se debe a la precarización del servicio público de la grúa municipal y a la vulneración de las condiciones laborales y económicas de los trabajadores. Además, resaltó que la plantilla continúa sin cobrar la paga extra de Navidad y el sueldo.
El origen del conflicto laboral se remonta a la nueva adjudicación del servicio municipal de grúa a la UTE Grúa Sevilla, la cual no habría respetado las condiciones laborales de los trabajadores de la empresa concesionaria anterior. A pesar de un acuerdo alcanzado en el pasado mes de abril para resolver el conflicto, la empresa habría incumplido de manera recurrente sus compromisos, generando malestar en la plantilla.
El comité de huelga denuncia el incumplimiento de acuerdos referentes a los contratos de relevo, así como la imposición de cláusulas abusivas de movilidad geográfica a los trabajadores. También critican la instalación de sistemas de videograbación en el centro de trabajo, con la intención de hacer lo mismo en los vehículos grúa, lo cual consideran una vulneración de los derechos de los trabajadores. Ante esta situación, el colectivo ha decidido llevar a cabo paros parciales como medida de presión para hacer valer sus derechos laborales.