La Policía ha tenido que intervenir en un altercado que tuvo lugar en Sevilla entre grupos de ultras del Betis y del Osasuna en los alrededores del Estadio Benito Villamarín, horas antes de que comenzara el partido. La situación se volvió violenta, generando escenas de confrontación entre los implicados.
Hasta el momento, no se han realizado detenciones, aunque no se descarta que se lleven a cabo, según han confirmado fuentes de la Policía a Europa Press. Los agentes retuvieron a alrededor de medio centenar de aficionados radicales para su identificación después de la pelea.
Algunos vecinos de la zona grabaron y compartieron en las redes sociales vídeos en los que se observa a varios individuos encapuchados portando palos, bengalas y botellas, enfrentándose a otro grupo de personas con una vestimenta similar.
En uno de estos vídeos se puede ver cómo los radicales golpean con palos y propinan patadas a un hombre que permanece inmóvil junto a una moto caída en la acera, hasta que la presencia de la policía les obliga a huir del lugar.
