El grupo socialista en el Ayuntamiento de Sevilla espera que en la próxima reunión con el alcalde José Luis Sanz se presenten informes jurídicos que aclaren si es factible suspender completamente nuevos registros de viviendas turísticas y licencias de obras y cambios de uso residencial a turístico. Si no es posible, el PSOE propone una alternativa que impida la apertura de nuevas viviendas turísticas en la ciudad, en contraposición a la propuesta inicial del equipo de Sanz que permitiría hasta 23.305 nuevos pisos turísticos.
Esta alternativa no solo detendría la proliferación de viviendas turísticas, sino que también podría reducir su presencia en los barrios más saturados como el Casco Antiguo y Triana. De esta manera, se buscaría evitar una mayor presión sobre los precios de alquiler y mejorar la convivencia en la ciudad.
En comparación con el límite del diez por ciento de viviendas turísticas respecto al total de residencias disponibles por barrio, la propuesta del PSOE reduce este porcentaje al 2,5 por ciento a nivel de toda la ciudad. Esto significaría que no habría espacio para más viviendas turísticas en Sevilla, e incluso sobrarían 995 según los socialistas.
Además, se plantea realizar inspecciones en viviendas turísticas registradas después de ciertos cambios en la normativa urbanística, con el objetivo de controlar su ubicación y cumplimiento de requisitos. Todo esto con la intención de frenar el aumento de pisos turísticos en la ciudad y corregir las exigencias urbanísticas aprobadas en mandatos anteriores.
El concejal socialista Francisco Javier Páez confía en que el gobierno de Sanz esté dispuesto a negociar y considerar las propuestas de la oposición para abordar el problema de las viviendas turísticas en Sevilla de manera efectiva. En caso contrario, la proliferación de estos alojamientos podría agravarse, según el PSOE.