El Consejo de Administración de la empresa metropolitana de aguas Emasesa, encargada de abastecer a doce municipios, incluyendo Sevilla, celebrará una reunión este lunes para discutir una propuesta de aumento en la tarifa del agua y la implementación de un nuevo bando de sequía. Según el alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, quien también preside la empresa, esta medida se debe a dos razones principales: el aumento de los costos de tratamiento del agua debido a la disminución de las reservas en los embalses y la necesidad de actualizar unos precios que han estado congelados durante años, para poder realizar inversiones necesarias.
En cuanto a la subida de la tarifa del agua, Sanz ha mencionado que se están considerando varias opciones, incluyendo un aumento gradual del 20%, 10% o 15%. Se plantea la posibilidad de distribuir el incremento en un 20% en 2024 y un 10% en 2025. Sin embargo, el alcalde ha afirmado que aún no se sabe qué propuesta será aprobada y que cualquier decisión tomada por Emasesa deberá ser votada posteriormente en el Pleno del Ayuntamiento.
Además de la subida en la tarifa, el Consejo de Administración también discutirá la aprobación de un nuevo bando de sequía. Este bando tiene como objetivo maximizar el esfuerzo y priorizar la utilización del agua para asegurar el suministro tanto para uso doméstico como para mantener los procesos productivos de las empresas. Se propone un ahorro del 10% en los consumos domésticos y se plantea la posibilidad de realizar controles mensuales de lectura y facturación del consumo de agua, previo aviso. Asimismo, se propone mantener la restricción del consumo de agua potable en usos ornamentales, recreativos y de limpieza, entre otros, que no sean esenciales, aunque esto pueda causar algunas molestias e incomodidades.
Dado que los niveles de reserva de agua se encuentran por debajo del umbral de entrada en estado de escasez, establecido en 221 hectómetros cúbicos, el bando insta a un esfuerzo colectivo y solidario para lograr un ahorro del 10% en el consumo y preservar las reservas actuales. Además, se propone que la lectura y facturación de los consumos de agua se realicen mensualmente, con aviso previo. Por último, se indica que la Policía Local podrá realizar tareas de vigilancia y control del cumplimiento de lo establecido en el bando, y en caso de ser necesario, reportará las conductas infractoras que podrán ser sancionadas según la legislación vigente.
Ante estas circunstancias especiales provocadas por la sequía, Emasesa busca tomar medidas para garantizar el uso responsable y sostenible del agua, protegiendo así las reservas y asegurando el suministro necesario para la población y las actividades productivas.