El sindicato mayoritario en la sociedad Transportes Urbanos de Sevilla (Tussam), la Agrupación Sindical de Conductores (ASC), ha considerado como una «medida innovadora» la nueva señalización en color rojo instalada para delimitar los carriles reservados a autobuses y taxis en la ciudad. Esta medida, que comenzó a implementarse en agosto con la retirada de los separadores que acotaban los carriles, pretende acelerar la velocidad comercial de los autobuses públicos. El sindicato ha manifestado su interés en esperar para comprobar si esta nueva señalización, junto con otras medidas, es efectiva para evitar las invasiones de tráfico privado en dichos carriles.
Isidro Fernández, secretario general de la ASC, ha expresado que la idea de la nueva señalización es novedosa y que, en principio, prefieren esperar para evaluar su eficacia antes de tomar una posición definitiva al respecto. Además, el sindicato ha relacionado esta medida con la promesa de incrementar el control policial en los carriles reservados al transporte público y la instalación de cámaras de videovigilancia en la vía y en los vehículos de Tussam.
Estas cámaras, según la ASC, enviarán imágenes de infractores a una unidad de Policía Local encargada de emitir las denuncias correspondientes. Sin embargo, este sistema aún debe superar obstáculos técnicos y jurídicos antes de su implantación. En Sevilla, los separadores de carriles bus han sido instalados y retirados en dos ocasiones debido a accidentes causados por conductores que colisionaban contra ellos.
La instalación de dichos separadores, realizada en 2021 para evitar invasiones de tráfico privado en los carriles reservados al transporte público, fue criticada por el actual Gobierno local del PP debido a los accidentes causados por la colisión de conductores contra estos elementos. Por esta razón, se decidió retirar los separadores e instalar una nueva señalización horizontal y vertical en color rojo que excluye el tránsito por estos carriles de vehículos privados (excepto motos y vehículos 100% eléctricos) y prohíbe las paradas y estacionamientos. Este nuevo modelo de señalización pretende separar el carril sin suponer un riesgo para nadie.