El Juzgado de Instrucción número 15 de Sevilla ha solicitado a la Fiscalía que emita un informe sobre si le corresponde o no a esta instancia judicial abordar el caso de presunta violencia doméstica y de género, lesiones y maltrato. Este caso se originó cuando el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número dos se inhibió a favor de los juzgados de Instrucción, después de que el acusado solicitara una rectificación de su inscripción registral identificándose como mujer.
En una providencia emitida recientemente, el Juzgado de Instrucción número 15 señaló que, debido a las circunstancias personales de los implicados, es necesario que el Ministerio Fiscal determine si es competente para continuar con el caso o si se debe plantear una cuestión de competencia ante la Audiencia Provincial. Esto se debe a que no se incluyó la opinión del Ministerio Fiscal en el auto emitido por el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número dos de Sevilla, el cual decidió inhibirse a favor de los Juzgados de Instrucción.
El Juzgado de Violencia sobre la Mujer número dos explicó en su auto que la persona investigada solicitó una rectificación de su mención registral de sexo en el Registro Civil de Carmona, pasando de ser considerado hombre a mujer. Esta modificación generó dudas sobre la competencia objetiva del juzgado para continuar con el caso, ya que la legislación establece que la competencia en casos de violencia de género corresponde al Juez de Violencia sobre la Mujer.
Ante esta situación, el abogado de la denunciante ha presentado un recurso de reposición contra la decisión del juzgado, argumentando que la rectificación del sexo en el registro civil no debería alterar la aplicación de la Ley de Violencia de Género en este caso. El letrado ha señalado que la persona investigada ya contaba con antecedentes por malos tratos en el pasado.
Por otro lado, la defensa de la persona investigada ha afirmado que siempre se ha identificado como mujer y que el cambio en su inscripción registral fue un paso importante para expresar su verdadera identidad. Según su abogado, la aprobación de la Ley Trans le brindó la oportunidad de hacer realidad su deseo de ser reconocida como mujer, y no como un intento de evitar la cárcel.
