La Fundación Iberdrola España y la Fundación Centro Español de Solidaridad de Sevilla, Proyecto Hombre, han unido esfuerzos para poner en marcha un programa de apoyo a mujeres en situación de vulnerabilidad en la ciudad. El proyecto, titulado «Cuando la resiliencia es el camino para las mujeres», busca favorecer la vida personal, autorrealización e integración autónoma y satisfactoria de las mujeres en el ámbito familiar, social y formativo-laboral, sin olvidar el objetivo de consolidar un estilo de vida saludable incompatible con las adicciones.

La financiación de 40.000 euros provenientes de la Fundación Iberdrola España beneficiará a alrededor de 50 mujeres y familias al año, lo que representa unas 300 personas en los próximos cinco años. Proyecto Hombre Sevilla, una entidad privada y sin ánimo de lucro, se dedica a prestar atención integral a personas y familias con problemas de adicciones, promoviendo su autonomía, desarrollo personal y su adecuada integración en la sociedad, así como la investigación y prevención de las drogodependencias y otras conductas adictivas.

El programa está dirigido a mujeres con problemas de adicción, así como a aquellas que enfrentan dificultades asociadas al rol femenino, como la ausencia de apoyo y acompañamiento familiar, cargas familiares que les dificultan centrarse en sí mismas, vivencias traumáticas de violencia de género, abusos físicos, psíquicos y sexuales, entre otros. Muchas de las participantes provienen de distintas casas de acogida.

El proceso consta de tres fases: una primera de adaptación y motivación, una segunda de conocimiento personal y una tercera de reincorporación sociolaboral. A través de entrevistas, itinerarios terapéuticos, talleres, convivencias y dinámicas, el proyecto busca promover la toma de conciencia, potenciar la autoestima, fomentar las relaciones sociales, promover académica y laboralmente, y reforzar el contacto con la realidad sociofamiliar. La meta final es afianzar un estilo de vida autónomo, facilitar los medios necesarios para la búsqueda de empleo y/o una vivienda, y consolidar la vinculación afectiva en el sistema familiar.

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