El Juzgado de lo Penal número cuatro de Sevilla ha establecido un juicio en contra de un hombre acusado de negarse a realizar la prueba de alcoholemia requerida por la Policía Local de Espartinas. Esto sucedió después de que chocara su coche contra vehículos estacionados y una farola, según fuentes del caso consultadas por Europa Press.
El incidente ocurrió el 9 de julio de 2020, poco después de que se levantara el primer estado de alarma por la pandemia de coronavirus Covid-19. El hombre, quien iba al volante de un automóvil Mercedes por la calle Emilio Muñoz de la urbanización Cerro Alto de Espartinas, colisionó con varios coches estacionados y con una farola. Tras la llegada de la Policía Local al lugar del accidente, el conductor se habría negado a realizar la prueba de alcoholemia, según las mismas fuentes.
Recientemente, una sentencia de la Audiencia de Sevilla redujo a seis meses el período de retirada del permiso de conducir impuesto a un hombre por conducir en Espartinas bajo «síntomas de intoxicación extrema» por el consumo de alcohol. Esto ocurrió después de chocar su coche contra una farola y no insuflar «suficiente» aire en el etilómetro. Aunque el tribunal corrobora los hechos, redujo su pena al aplicar la atenuante de dilaciones indebidas muy cualificadas en lugar de simples, debido al «desmesurado» período de once años transcurridos entre los hechos y su condena inicial.
Detalles específicos de la sentencia emitida en julio pasado por la Sección Séptima de la Audiencia, abordan un recurso de apelación del hombre contra una sentencia previa del Juzgado de lo Penal número ocho, que lo condenaba a una multa y un año de retiro del permiso de conducir por un delito contra la seguridad vial con la atenuante de dilaciones indebidas.
El Juzgado de lo Penal número ocho declaró probado que el acusado conducía un coche por Espartinas «en condiciones psicofísicas no adecuadas» después de ingerir bebidas alcohólicas. Esto provocó que chocara con una farola del alumbrado público, causando daños tasados en 2513,62 euros. Los agentes de la Policía Local intentaron sin éxito realizarle la prueba de detección alcohólica debido a su estado de embriaguez.
En su recurso de apelación, la defensa del acusado pidió su absolución y, en segundo lugar, la apreciación de la atenuante de dilaciones indebidas como muy cualificadas, con imposición de una multa de tres meses con una cuota diaria de tres euros y seis meses de privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores.
El tribunal de la Audiencia rechazó la petición de absolución debido a los claros síntomas de intoxicación etílica presentados por el acusado, quien intentó explicar cada uno de sus síntomas con un origen distinto a la ingesta de alcohol. Además, consideró que el período de once años para resolver el caso era «desmesurado». Después de todo esto, el tribunal redujo a la mitad la multa impuesta y el período de retirada del permiso de conducir.
