El abogado José Antonio Sires, representante legal en el caso de presunta violencia doméstica y de género, ha solicitado al Juzgado de Violencia sobre la Mujer número dos de Sevilla que imponga un dispositivo de localización a la persona investigada, quien se ha registrado como mujer para evitar las restricciones impuestas anteriormente.
En su escrito al mencionado juzgado, el letrado recuerda que en julio pasado se impuso a la persona registrada como «Candi» la prohibición de acercarse a su expareja y de comunicarse con ella, medidas que presuntamente han sido incumplidas con insultos y amenazas denunciadas en agosto de 2024.
El Juzgado de Violencia sobre la Mujer número dos había derivado el caso a los juzgados de Instrucción, argumentando un cambio en la mención registral del sexo del investigado, quien ahora es considerado mujer. Ante esta decisión, el abogado ha presentado un recurso de reposición alegando que el cambio de sexo no debería alterar las leyes de protección contra la violencia de género.
La defensa de la persona investigada asegura que siempre se ha identificado como mujer y que el cambio de sexo fue un paso significativo en su vida, motivado por la aprobación de la Ley Trans. Además, sostiene que la denuncia en su contra era falsa y que la nueva identidad le permitió lograr una sentencia absolutoria.